4 razones por las que Carrie de Chloë Moretz es REMEDO

Posted on 18 noviembre, 2013 Actualizado enn 18 noviembre, 2013

Brian de Palma hizo en 1976, una verdadera obra de arte con Carrie de  Stephen King. Los efectos visuales logrados en aquella década, hicieron lo imposible para recrear la vida una de puberta telequinética en pleno despertar sexual. 37 años después, la directora Kimberly Peirce intenta replicar las obra de Palma, quedándose muy lejos.

La premisa anterior, no sólo la baso en mi queja del gran remedo que fue la Carrie de Chloë Moretz en la pantalla grande, si no también en las críticas recopiladas en la sala de cine y pasillos de Cinépolis. A todos, o al menos a los que nos jactamos de almas viejas, nos pareció que la figura de Moretz está lejos de retratar a la acomplejada Carrie de King y años luz de reflejar la figura delgada, paliducha y débil de Sissy Spacek en el filme de los setentas.

Y para entrar en detalles, aquí mis 5 razones por las que Carrie de Chloë Moretz es REMEDO:

1. Chloë Moretz jugando a ser actriz. Se lo decía a mi novia, miro a Moretz y sólo puedo pensar en una cosa: Hit Girl. No puedo negar, ha hecho grandes papeles como Abby como en Let Me In, pero jugar a ser Carrie White era sin duda una prueba de fuego. En definitiva se quedó corta con las necesidades histriónicas del personaje, sin contar que la complexión física parecían más de una niña cuidada, a una maltratada y solitaria White. Ni en 100 años podemos comparar la escena de «la regla» de Cloë con la de Spacek.

2. Mucha sangre, muchos efectos baratos. La escena final, la ira de Carrie frente a sus compañeros después de ser coronada como princesa, además de tener un loop espantoso del momento en el que era batida de sangre de cerdo, abusó de los efectos especiales. La Carrie de Moretz daba más ternura que el miedo e ira que transmitía Spacek.
¿Es todo lo que se puede hacer en 2013?

Carrie 2013

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